Introducción  Subir

El Índice de Precios de Consumo (IPC) requiere para su elaboración la selección de una muestra de bienes y servicios representativa de los distintos comportamientos de consumo de la población, así como la estructura de ponderaciones que defina la importancia de cada uno de estos productos. Como en la mayoría de los países, el IPC español obtiene esta información de la Encuesta de Presupuestos Familiares (EPF), que fue realizada por última vez en el periodo comprendido entre abril de 1990 y marzo de 1991; esta encuesta es la que se utilizó para llevar a cabo el anterior cambio de base del IPC.

Desde entonces, el comportamiento de los consumidores ha cambiado considerablemente, ya sea porque variaron los gustos o las modas, su capacidad de compra, o porque han aparecido nuevos productos en el mercado hacia los que se desvía el gasto. Todos estos cambios deben reflejarse en la composición del IPC y en su estructura de ponderaciones; es por ello por lo que se hace preciso realizar un cambio de base que permita una mejor adaptación de este indicador a la realidad económica actual.

A partir del 2º trimestre de 1997 se implantó la nueva Encuesta Continua de Presupuestos Familiares (ECPF), con el fin de sustituir a la que se venía realizando de forma trimestral y a la Encuesta Básica que se hacía en periodos de entre ocho y nueve años, que era la utilizada para los distintos cambios de base del IPC.

Esta nueva encuesta permite disponer de información sobre el gasto de las familias de forma más detallada que su predecesora y con una periodicidad mayor que la Encuesta Básica. Esto hace que el nuevo Sistema del IPC, cuyas líneas generales se presentan en este documento, parta de un planteamiento conceptual diferente a todos los Sistemas anteriores.

Por un lado, destaca su dinamismo, ya que se podrán actualizar las ponderaciones en periodos cortos de tiempo, lo que sin duda redundará en una mejor y más rápida adaptación a la evolución del mercado. Además, esta adaptación a la evolución del mercado y al comportamiento de los consumidores se conseguirá también con la posibilidad de incluir nuevos productos en el momento en que su consumo comience a ser significativo.

Por otro lado, el nuevo Sistema será técnicamente más moderno, ya que permitirá la inclusión inmediata de mejoras en la metodología que ofrezcan los distintos foros académicos y de organismos nacionales e internacionales. En este sentido, se valorarán especialmente las decisiones provenientes del Grupo de Trabajo para la armonización de los IPC de la Unión Europea (UE).

Con este propósito, se creará un proceso de actualización continua de la estructura de consumo, basado en un flujo continuo de información entre el IPC y la ECPF, como fuente fundamental de información.

Características más importantes  Subir

Período base  Subir

El período base es aquél para el que la media aritmética de los índices mensuales se hace igual a 100. El año 2001 es el periodo base del nuevo Sistema, esto quiere decir que todos los índices que se calculen estarán referidos a este año.

Período de referencia de las ponderaciones  Subir

Es el período al que están referidas las ponderaciones que sirven de estructura del Sistema; dado que éstas se obtienen de la ECPF, el período de referencia del IPC es el período durante el cual se desarrolla esta encuesta.

El actual cambio de Sistema se ha realizado con la información proveniente de la ECPF, que proporciona la información básica sobre gastos de las familias en bienes y servicios de consumo. Así, el periodo de referencia del nuevo Sistema es el comprendido entre el 2º trimestre de 1999 y el 1º trimestre de 2001.

Para el cálculo de las ponderaciones se ha dado más importancia a la información correspondiente a los trimestres más cercanos al momento de la actualización.

Muestra  Subir

Para obtener indicadores significativos para todos los niveles de desagregación funcional y geográfica para los que se publica el IPC, se ha estructurado el proceso de selección de la muestra en tres grandes apartados, cada uno de los cuales tiene como objetivo la selección de los diferentes componentes de la misma. Estos son los siguientes :

  • Selección de municipios.
  • Selección de zonas comerciales y establecimientos.
  • Determinación del número de observaciones.

Para la selección de municipios, como en bases anteriores, se han utilizado criterios poblacionales, y se ha tenido en cuenta la situación de las principales zonas comerciales en cada una de las provincias. La muestra de municipios ha aumentado respecto a la base 92, pasando de 130 a 141 (para alimentación) y de 70 a 97 ( para resto).

Por otro lado, se ha prestado especial atención a los distintos tipos de establecimiento existente, así como a la recogida de precios de los artículos perecederos en municipios no capitales. Con todo ello, se ha aumentado el número de precios procesados respecto a la base anterior, pasando ahora a ser aproximadamente 180.000 precios mensuales.

Campo de consumo  Subir

Es el conjunto de los bienes y servicios que los hogares destinan al consumo; no se consideran, pues, los gastos en bienes de inversión ni los autoconsumos, autosuministros ni alquileres imputados. En la ECPF los bienes y servicios han sido clasificados según la clasificación internacional de consumo COICOP (en inglés, Classification Of Individual COnsumption by Purpose). Así, cada parcela de consumo de la ECPF debe estar representada por uno o más artículos en el IPC, de forma que la evolución de sus precios represente la de todos los elementos que integran dicha parcela.

Cesta de la compra  Subir

Es el conjunto de bienes y servicios seleccionados en el IPC cuya evolución de precios representan la de todos aquellos que componen la parcela COICOP a la que pertenece.

El proceso para determinar la composición de la cesta de la compra y su estructura de ponderaciones utiliza como fuente fundamental de información la ECPF; así, en función de la importancia de cada parcela se han seleccionado uno o más artículos para el IPC. El número total de artículos que componen la nueva cesta de la compra es 484.

Para cada uno de los artículos se elabora su descripción o especificación con el fin de facilitar su identificación por parte del encuestador y permitir la correcta recogida de los precios. Estas especificaciones tienen en cuenta las particularidades propias de cada región.

Clasificación funcional  Subir

El IPC base 2001 se adapta completamente a la clasificación internacional de consumo COICOP.

Así, la estructura funcional del IPC constará de 12 grupos, 37 subgrupos, 80 clases y 117 subclases. Además, se mantienen las 57 rúbricas existentes y se amplía el número de grupos especiales.

Método general de cálculo  Subir

Hasta ahora, todos los sistemas españoles anteriores utilizaron lo que se denomina un índice tipo Laspeyres con base fija, al igual que otros muchos países de la Unión Europea. La ventaja fundamental de un índice de este tipo es que permite la comparabilidad de una misma estructura de artículos y ponderaciones a lo largo del tiempo que esté en vigor el Sistema; sin embargo, tiene un inconveniente y es que la estructura de ponderaciones pierde vigencia a medida que pasa el tiempo y evolucionan las pautas de consumo de los consumidores.

El nuevo Sistema utilizará la fórmula de "Laspeyres encadenado", que consiste en referir los precios del periodo corriente a los precios del año inmediatamente anterior; además, con una periodicidad que no superará los dos años se actualizarán las ponderaciones de las parcelas con información proveniente de la ECPF.

La utilización de las ponderaciones provenientes de la ECPF para calcular los índices encadenados evita la auto-ponderación de las parcelas del IPC por medio del nivel de los índices, es decir, las parcelas no irán ganando peso en la cesta de la compra a medida que vaya alcanzando mayor magnitud su índice.

Por otro lado, la actualización anual de ponderaciones tiene las siguientes ventajas:

  • El IPC se adapta a los cambios del mercado y de los hábitos de consumo en un plazo muy breve de tiempo;
  • Se puede detectar la aparición de nuevos bienes o servicios en el mercado para su inclusión en el IPC, así como la desaparición de los que se consideren poco significativos.

Básicamente, el proceso de cálculo es el mismo que el de un Laspeyres: se calculan medias ponderadas de los índices de los artículos que componen cada una de las agregaciones funcionales para las cuales se obtienen índices, y se compraran con los calculados el mes anterior. En este caso las ponderaciones utilizadas no permanecen fijas durante todo el período de vigencia del sistema.

Por tanto, la expresión de la fórmula general es la siguiente:

Formula

donde:

Formula es el índice general en el mes m del año t referido al año t-1.

Formula es la ponderación del componente i referida al año t-1.

Formula es el índice del componente i en el mes m del año t referido al año t-1.

Otra novedad importante en el nuevo Sistema es la utilización de la media geométrica para el cálculo de los precios medios provinciales de todos los artículos de la cesta de la compra, que intervienen en la elaboración del índice mensual.

Cambios de calidad  Subir

El tratamiento de los cambios de calidad es uno de los temas que más afectan a cualquier índice de precios.

Un cambio de calidad ocurre cuando cambia alguna de las características de la variedad para la que se recoge el precio y se considera que este cambio implica un cambio en la utilidad que le reporta al consumidor.

Para la correcta medición de la evolución de los precios es preciso estimar en qué medida la variación observada del precio es debida al cambio en la calidad del producto y qué parte de esta variación es achacable al precio, independientemente de su calidad.

Los métodos más utilizados en el IPC son la consulta a expertos, que consiste en solicitar a los propios fabricantes o vendedores la información para poder estimar el cambio de calidad; los precios de las opciones, que analiza los elementos componentes del antiguo producto y del nuevo para establecer el coste de las diferencias entre ambos; y el precio de solapamiento, basado en suponer que el valor de la diferencia de calidad entre el producto que desaparece y el nuevo es la diferencia de precio entre ellos en el periodo de solapamiento, es decir, en el periodo que estén en vigencia los precios de ambos.

El nuevo Sistema introduce una novedad en los métodos de ajustes de calidad que se vienen utilizando hasta ahora en el IPC, y es la utilización de la regresión hedónica para realizar ajustes de calidad en determinados grupos de productos, como los electrodomésticos. Dicho método se utiliza como complemento a los citados anteriormente.

Durante el año 2002 se continuarán los estudios que permitirán determinar la viabilidad de aplicar este nuevo método de ajuste de calidad a otros artículos de la cesta de la compra, en función de la información disponible.

Inclusión de las ofertas y rebajas  Subir

Uno de los cambios más importantes que se producirán en el IPC con la entrada en vigor del nuevo Sistema, base 2001, es la inclusión de los precios rebajados.

El IPC, base 1992, no contemplaba la recogida de estos precios por lo que su inclusión en el nuevo Sistema producirá una ruptura en la serie de este indicador, que no es posible solucionar totalmente con el método de los enlaces legales, utilizado cada vez que se lleva a cabo un cambio de base.

No obstante el INE facilitará los datos correspondientes a las tasas de variación a largo plazo, para evitar la falta comparación por la ruptura de la serie.

Enlace de series  Subir

Como en los anteriores cambios de base el INE publicará las series enlazadas, así como los coeficientes de enlace que permiten su cálculo, en aquellos casos en los que sea posible dar continuidad a la serie. En los casos en los que no exista una equivalencia exacta se indicará oportunamente.

El coeficiente de enlace legal se calcula como el cociente entre el índice del mes de diciembre de 2001 en base 2001 y en base 92. Es por este coeficiente por el que se multiplican los índices en base 92 y se obtienen los índices en base 2001.

Periodicidad del cambio de Sistema  Subir

Debido a la disponibilidad de datos anuales sobre ponderaciones provenientes de la Encuesta Continua de Presupuestos Familiares, una de las modificaciones más importantes en este nuevo proceso de cambio de sistema es la actualización continua de ponderaciones.

Una vez establecido el nuevo Sistema de IPC, el proceso constará de dos partes:

A) Adaptación continua del IPC.

Consistirá en la revisión anual de las ponderaciones para determinados niveles de desagregación geográfica y funcional; en ella se estudiarán cada año la conveniencia o no de ampliar la composición de la cobertura de productos así como la posibilidad de modificar alguno de los tratamientos empleados en el cálculo del índice.

B) Revisión estructural del IPC.

Cada cinco años se realizará un completo cambio de base; por tanto, las operaciones a realizar consistirán en determinar la composición de la cesta de la compra, las ponderaciones para los niveles más desagregados y la selección de la muestra. También vendrá acompañada de una revisión mucho más profunda de todos los aspectos metodológicos que definen el IPC.

De esta forma, se conseguirá un indicador más dinámico y que se adapte de forma más rápida a los movimientos del mercado y a la aparición de innovaciones metodológicas. Además, se cumplirá con las exigencias de la UE a través de Eurostat.

Se establece a partir de ahora un marco de actuación totalmente distinto al existente hasta el momento, al no tratarse de un mero cambio de base y sí de un proceso mucho más amplio.