La recogida de datos a través de internet ha finalizado el día 15 de mayo de 2012
Censo del Conde de Aranda / Censo de Floridablanca / Censo de Manuel Godoy / Censo de 1897
Resultados detallados: Censos de 1850, 1860, 1877, 1887 y 1897
La historia de los censos de población en España ha de iniciarse, necesariamente, con una mención de los Vecindarios realizados por la monarquía hispánica a lo largo de los siglos XVI y XVII. Estas operaciones, cuya principal característica es la de intentar averiguar el número de vecinos existente en los diferentes lugares del reino de Castilla, tenían fines puramente fiscales. La unidad investigada -el vecino- nos resulta un tanto difícil de definir con precisión y, por esta razón, su conversión en número de habitantes es una operación aún no resuelta de forma satisfactoria.
Por todo esto, la verdadera historia de los censos de población en España comienza en 1768, año en el que el Conde de Aranda da las ordenes oportunas para que se inicien los trabajos encaminados a averiguar la verdadera población de esta Monarquía para de esta forma poder promover ideas útiles al Estado, según los sexos y las edades.
La realización de este Censo del Conde de Aranda se encomendó a los obispos que recibieron las instrucciones oportunas para que, a través de los párrocos de sus respectivas diócesis, se recogiesen los datos requeridos de los diferentes lugares de las mismas de acuerdo con un formulario único.
En este formulario se debía de resumir la población de dichos lugares en una tabla de doble entrada de acuerdo con seis grupos de edad, sexo y estado civil.
Dado que los resultados obtenidos con estos trabajos no fueron tan satisfactorios como se esperaba, el Conde de Floridablanca preparó la ejecución de un nuevo Censo de población.
El primer paso para la ejecución de este Censo se dio cuando, por Real orden de 1785, se ordenó a los intendentes de las diferentes provincias que remitiesen una relación de todos los pueblos de las mismas a fin de crear un Nomenclátor que delimitase el campo de actuación.
Los trabajos para la ejecución del Censo de Floridablanca se iniciaron en 1787 de acuerdo con las instrucciones contenidas en la Real Orden del 28 de julio de 1786.
En este caso, se encomendó la ejecución del mismo a los intendentes de cada provincia que se encargarían de hacer llegar a las autoridades civiles de cada lugar (alcaldes, regidores...) un cuestionario único en el que se debían de consignar los datos solicitados.
En el cuestionario se debía de resumir la población en una tabla de doble entrada similar a la utilizada en 1768. Además se debía de clasificar la población de acuerdo con una tabla de ocupaciones de 23 clases.
El siguiente Censo de población sería ejecutado por orden de D. Manuel Godoy en 1797 dándose la circunstancia de que, en este caso, tan sólo conocemos los resultados obtenidos por el mismo, publicados en 1801, siéndonos desconocidos los detalles de su ejecución.
Las guerras napoleónicas y la inestabilidad política de la época posterior impidieron la ejecución de nuevos censos hasta que en 1857 se ejecutó un nuevo Censo de población que sería publicado en 1858. En este nuevo Censo se utilizó por primera vez la división en provincial aprobada en 1833 y que sigue vigente en la actualidad. También fue novedosa la clasificación de la población en establecida y transeúnte. Hay que decir que los mismos responsables de este Censo advirtieron, en el momento de su publicación, de la poca fiabilidad de las cifras obtenidas recomendando, en consecuencia, que se realizase un nuevo Censo tan rápidamente como fuese posible a fin de poder aprovechar la experiencia acumulada.
Siguiendo estas recomendaciones, se realizó otro Censo en 1860 de forma mucho más cuidadosa que el anterior y cuya principal novedad, además de la fiabilidad de los datos, consistió en ofrecer tablas de población por instrucción elemental, clasificación de población por unos intervalos de edad más completos y, sobre todo, calcular la población de derecho.
Aunque en el Real Decreto de 1858 que ordenaba la realización del Censo de 1860 se preveía que este tipo de operación se debía de renovar cada cinco años, un nuevo periodo de inestabilidad política impidió este propósito de tal manera que el siguiente Censo no se realizó hasta el año 1877, ya bajo la el reinado de Alfonso XII y siendo jefe de gobierno Martínez Campos. Los siguientes Censos se realizaron en 1887 y en 1897, cerrándose así la serie de censos realizados en el siglo XIX.